martes, 19 de junio de 2012


despierto en medio de la noche. me encuentro de golpe con la conciencia como quien se va de bruces contra el suelo al tropezar con un obstáculo insalvable. por algunos segundos hasta siento el vértigo de la escena. el terror concentrado. recuerdo la existencia del reloj. el tic tac interminable sobre la pared. todo aquí es blanco. el tono de la calma, dicen. me levanto de la cama para golpear el cemento como quien patalea contra la semiótica. blanco farsante. me dejo caer. el piso está frío. frío. el poste de la calle alumbra una parte de mi cuadro, justo la que no me gusta. debería haberle puesto más blanco a la mezcla. debería ser un verde claro en vez de un verde oscuro. ¿por qué estoy aquí? soy un cuerpo corrupto, esa parte calculada del sistema que hay que desechar. justifico la existencia de este lugar macabro y él me justifica a mi. "deja de pensar". me retumba la voz en la cabeza.

viernes, 1 de junio de 2012

cuesta traer la cabeza al presente. parece que siempre anduviera unos siglos más atrás, adelante o entre medio.  mañana me iré a cortar el pelo. hace años que no voy a la peluquería. los rulos me llegan a la mitad de la espalda. tengo un nido en la cabeza por culpa de ellos. una nube me envuelve el cráneo casi todos los días. una nube negra, condensada. cuando no están atrapadas en cosas de nubes, las ideas me llueven de golpe. el entusiasmo me dura mientras goteo.